En últimos días, la titular de la Brigada de Vigilancia Animal, Rebeca Zokol, ha sido vista en múltiples eventos de campaña de Clara Brugada, candidata a jefa de gobierno, en horario laboral. Además, se ha evidenciado su participación activa en actividades proselitistas, incluso presentándose como jefa de prensa de...
marzo 23, 2024
En últimos días, la titular de la Brigada de Vigilancia Animal, Rebeca Zokol, ha sido vista en múltiples eventos de campaña de Clara Brugada, candidata a jefa de gobierno, en horario laboral. Además, se ha evidenciado su participación activa en actividades proselitistas, incluso presentándose como jefa de prensa de la candidata de Morena a la Benito Juárez, Leticia Varela.
Este comportamiento levanta interrogantes sobre la ética y responsabilidad de los funcionarios públicos de Morena en la CDMX, especialmente cuando se trata de desempeñar funciones que requieren compromiso y dedicación. La presencia de Zokol en eventos políticos durante su horario laboral plantea la posibilidad de que esté descuidando sus responsabilidades oficiales en la Brigada de Vigilancia Animal, lo que podría afectar las acciones emprendidas en esta Unidad Especial de Seguridad.
Además de las implicaciones éticas, es importante señalar que este tipo de acciones pueden acarrear consecuencias legales. Según lo establecido en la ley de servidores públicos, aquellos funcionarios que abandonen su puesto de trabajo para realizar actividades ajenas a sus responsabilidades podrían ser sujetos a sanciones disciplinarias, que van desde amonestaciones hasta la destitución del cargo, dependiendo de la gravedad de la falta.
Es fundamental que los funcionarios comprendan la importancia de separar sus actividades políticas de sus responsabilidades laborales para la institución a la que sirven.
Se espera que autoridades como Pablo Vázquez Camacho, titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, vigile y garantice el cumplimiento de las normativas que regulan la conducta de los servidores públicos anexos a su secretaría, como es el caso de Zokol, con el fin de preservar la integridad y la eficacia de las instituciones gubernamentales en beneficio de la sociedad en su conjunto.
Fuente: ContraRéplica