Las relaciones sentimentales de Eduardo Ramírez Tiburcio, alias «El Chori», resultaron fundamentales para la operación y la caída de La Unión Tepito. El entramado de «Las Novias de La Unión Tepito» Eduardo Ramírez Tiburcio, conocido como «El Chori» y figura prominente de La Unión Tepito, no solo lideraba actividades...
junio 5, 2025
Las relaciones sentimentales de Eduardo Ramírez Tiburcio, alias «El Chori», resultaron fundamentales para la operación y la caída de La Unión Tepito.
Eduardo Ramírez Tiburcio, conocido como «El Chori» y figura prominente de La Unión Tepito, no solo lideraba actividades ilícitas como extorsiones y narcomenudeo. Su imperio criminal también se apoyó en relaciones sentimentales con mujeres que, a menudo, desempeñaron roles operativos dentro de su estructura delictiva. Este patrón es parte del fenómeno identificado por las autoridades como «Las Novias de La Unión Tepito«, un término que se popularizó entre 2018 y 2021 debido a las detenciones, desapariciones y asesinatos de mujeres vinculadas a líderes de esta organización.
Las parejas de «El Chori» no eran meros acompañantes; muchas participaron activamente en operaciones clave, facilitaron su ocultamiento y, en ocasiones, se convirtieron en eslabones operativos. La intimidad fue, para la organización, un blindaje y un medio de movilidad, pero también un flanco expuesto.
Entre las mujeres que estuvieron ligadas a «El Chori» se destacan varias figuras que tuvieron distintos grados de involucramiento y desenlaces:
Las mujeres cercanas a La Unión Tepito, según reportes de la SSC-CDMX, cumplían diversas funciones estratégicas para la organización:
El uso del concepto «novias de La Unión» ha generado controversia. Colectivos como «Nosotras Tenemos Otros Datos» y la «Red de Madres Buscadoras» han criticado el término, argumentando que muchas de estas mujeres eran menores de edad o fueron reclutadas bajo engaño. Especialistas señalan que la etiqueta puede ocultar la diversidad de experiencias, abarcando desde víctimas cooptadas hasta colaboradoras, e incluso mujeres sin ninguna participación delictiva. Casos como los asesinatos de Valeria Díaz Martínez (ejecutada en mayo de 2020) y Paulina Arreola Pérez (asesinada en junio de 2021), ambas parejas de «El Alexis» (otro cabecilla de La Unión), consolidaron la popularidad del término debido a sus patrones similares: ejecuciones directas y sin mensajes firmados.
Con información de: Infobae