Una banda de ladrones opera en la Roma Sur, usando una «guarida secreta» en Xochimilco para almacenar los objetos robados, evidenciando la inacción de las autoridades. Los «cristaleros» de la Roma Sur operan con impunidad En la Ciudad de México, una banda de delincuentes, conocidos como «cristaleros», ha sembrado...
agosto 1, 2025
Una banda de ladrones opera en la Roma Sur, usando una «guarida secreta» en Xochimilco para almacenar los objetos robados, evidenciando la inacción de las autoridades.
En la Ciudad de México, una banda de delincuentes, conocidos como «cristaleros», ha sembrado la inseguridad en colonias como la Roma Sur. Este grupo criminal se especializa en romper los cristales de los vehículos estacionados para sustraer objetos de valor. Según el testimonio de los vecinos, los robos han aumentado en los últimos dos años, y a pesar de la denuncia, la banda parece operar con total impunidad.
Los residentes de la zona, ante la falta de patrullaje y la poca vigilancia en calles como avenida Nayarit, han tomado medidas propias, como la instalación de cámaras de seguridad privadas. Afirman que la banda es siempre la misma, que rondan la zona en distintos vehículos, con diferentes vestimentas y apariencias, y utilizan supuestos detectores de dispositivos electrónicos para localizar objetos de valor en los autos. La frecuencia de estos delitos es tal que los vecinos ya se han acostumbrado a ver los vidrios rotos.
El modus operandi de esta banda quedó al descubierto tras el robo a un grupo de jóvenes que acababan de regresar de un viaje a París. El pasado 23 de julio, mientras cenaban en la calle Nayarit, su vehículo fue violentado y les sustrajeron nueve maletas. El atraco se llevó a cabo en cuestión de minutos, con múltiples «cristalazos» en las ventanas traseras y laterales del coche.
Sin embargo, los ladrones no contaban con que el equipaje estaba equipado con dos rastreadores satelitales Apple AirTag. Los jóvenes, con la ubicación de sus pertenencias en tiempo real, acudieron a la policía. El rastreador los condujo a un inmueble en la alcaldía Xochimilco, el cual, según el dispositivo, fungiría como la guarida de la banda. No obstante, al llegar al lugar, los policías se negaron a actuar, argumentando que no contaban con una orden de cateo.
La inacción de las autoridades no termina ahí. Una de las víctimas confirmó que, tras la visita de la policía, la calle que supuestamente funcionaba como bodega fue limpiada. La ubicación del rastreador satelital sigue señalando el mismo inmueble en Xochimilco, un lugar que, según los vecinos, está permanentemente custodiado por decenas de cámaras.
A pesar de las denuncias y la evidencia, los residentes de la zona aseguran que la policía acude constantemente al sitio por rastreadores de distintos robos, pero los autos sospechosos «vienen y van» sin que se tome ninguna medida. Esto contrasta de forma directa con las declaraciones de las autoridades capitalinas, que en enero de este año aseguraron que el promedio de este tipo de delitos se encontraba en su mínimo histórico, con 2.9 robos diarios, frente a los 13.8 de 2018. Este hecho expone la desconexión entre la versión oficial y la realidad que viven los ciudadanos en la capital.
Con información de: Excélsior